¿Recuerda la escena de “Regreso al futuro: Parte II” cuando los autos voladores y los zapatos autoadhesivos eran la norma para las personas que vivían en 2015? Si bien todavía no los tenemos, prepárate para las casas flotantes y la vida marina ...
No Estacionamiento? Vecinos ruidosos? ¡No hay problema! ¿Renta de la tierra? ¿Que es eso?
La tecnología avanza rápido, por lo que no es una idea tan descabellada pensar que algún día todos viviremos en casas voladoras. Según el informe, la forma general probablemente sería similar a la que vemos en los drones ahora, solo a gran escala, con hélices gigantes que girarían para crear un flujo de aire que levanta la casa de la suelo. También vale la pena tener en cuenta que se necesitará una distribución equitativa del peso para equilibrar la propiedad.
Si alguna vez nos encontramos viviendo un apocalipsis, el informe sugiere que seremos alojados bajo tierra. Esto, por supuesto, sería por motivos de seguridad, pero vivir bajo tierra limitaría la luz y el calor. Serían necesarias cúpulas de superficie y ventanas con forma de trampilla, y lo ideal sería algún tipo de ventilación. En cuanto a la ubicación, estas casas se construirían mejor cerca de áreas agrícolas.
Los efectos devastadores del calentamiento global podrían significar que algún día tendremos que adaptarnos a vivir la vida en el agua. La estructura probablemente estaría hecha de vidrio o plástico, ya que resistiría mejor, dependiendo de la presión y la profundidad de una plataforma, o algo similar, para aprovechar el océano y obtener algo de luz. Para ayudar con la distribución y prevenir la erosión, las casas marinas tendrán forma de cúpula y se necesitará acceso a un ascensor para entrar o salir. Bueno si te apetece nadar rápido, malo para aquellos que han visto "Tiburón" demasiadas veces.
Las casas en Marte, en parte subterráneas y en parte visibles, serían bastante complicadas. La forma de la cúpula permitirá el soporte estructural y protegerá a los que están dentro del duro clima exterior y de demasiada luz. El uso del material tendría que centrarse en titanio o plástico o vidrio de alta resistencia, y los paneles solares fuera del edificio promoverán la generación de energía.