Donde vivo en el norte de Florida, cuando termina el verano, la exuberancia que amo comienza a parecer un poco cansada. Los árboles que florecieron brillantes y verdes hace solo unos meses se ven cansados y gastados, y las flores que prosperan bajo el sol luchan por sacar sus últimos gritos de color antes de que llegue un clima más fresco.
Incluso si vives en un lugar con un clima menos extremo, estos "días caninos del verano" te harán pensar en el cambio de estaciones. Los fanáticos del otoño comienzan a soñar con el clima de los suéteres y las especias de calabaza, y los amantes del verano, deprimidos porque el verano casi termina, despotrican sobre que es demasiado temprano para todo eso.
Ahora que la temporada está llegando a su fin, es hora de hacer frente a un desastre doméstico que el verano marcó el comienzo: los ventiladores sucios y polvorientos. Ventiladores de techo, ventiladores de caja, ventiladores de pie, ventiladores personales, limpiemoslos.
Los ventiladores polvorientos son antiestéticos y pueden recircular el polvo por toda la casa. Limpiarlos hace que su hogar se vea y se sienta más limpio. Deshacerse del polvo que se acumula en sus ventiladores también les ayuda a funcionar de manera más eficiente. Como con cualquier máquina, un buen mantenimiento aumenta la longevidad de su unidad.
No importa lo que use, asegúrese de que todo esté completamente seco antes de intentar usar sus ventiladores nuevamente.
Recuerde: se trata de mejorar, no de perfección. Cada semana, puede elegir trabajar en la tarea que le enviamos o abordar otro proyecto al que tenía la intención de llegar. También está completamente bien saltarse un fin de semana si está ocupado o no siente la tarea.
Combiths de Shifrah
Contribuyente
Con cinco hijos, Shifrah está aprendiendo un par de cosas sobre cómo mantener una organización bastante organizada y casa bastante limpia con un corazón agradecido de una manera que deja mucho tiempo para las personas que importan la mayoría. Shifrah creció en San Francisco, pero ha llegado a apreciar la vida de una ciudad más pequeña en Tallahassee, Florida, que ahora llama su hogar. Ha escrito profesionalmente durante veinte años y le encanta la fotografía de estilo de vida, el mantenimiento de la memoria, la jardinería, la lectura e ir a la playa con su esposo e hijos.