Muchos de nosotros conocemos las muñecas de cerámica como las cosas de los gabinetes de nuestras abuelas o las habitaciones de nuestra infancia. Al tipo más grande, con los vientres de felpa y las cabezas, manos y pies de porcelana, se les ha dado el tratamiento espeluznante muchas veces, lo suficiente como para provocar una sensación de temor sin adornos en todos. Las pequeñas figuras de cerámica se han librado en su mayoría de esa asociación. Pero la artista Jessica Harrison realmente ha aprovechado su potencial macabro.
Para su serie "Broken", Harrison utiliza figuras de cerámica encontradas, de acuerdo a Hiperalérgico, con hermosos rostros, vestidos y poses que se parecen a las princesas de Disney de la vieja escuela.
Harrison le da a las muñecas alteraciones sangrientas. En lugar de sostener una manzana encantada o un amigo de la criatura del bosque, muchos sostienen sus propios corazones, arrancados de sus propios cofres.
Otras muñecas de la serie se han arrancado sus propias caras, o las han hecho volar por alguna fuerza desconocida.
"La práctica de Harrison depende de una falibilidad fundamental del cuerpo y los tipos de conocimiento que se pueden generar a través de errores e inexperiencia", se lee en un comunicado en el sitio web del artista. "Ella tiene un interés particular en la falibilidad de la observación y la brecha entre lo visto y lo sentido, lo visual y lo táctil".
Fuera de la serie "Broken", Harrison tiene muchas otras obras de arte misteriosas centradas en las muñecas y el cuerpo. En otras figuras encontradas, ella ha agregado su propio esmalte, con un efecto perturbador.