Olvídate de una caja de bombones. La vida es como un archivador. Eso se llena cada año con papel. Papel real, real. Y la infancia es donde comienza. Como padres, nos encontramos adquiriendo montones de papel cada año y lamentamos la preciosidad de cada hoja. ¿Qué guardar? ¿Qué tirar? ¿Qué digitalizar? Aquí hay un plan para administrarlo todo.
Para comenzar: no intentes tomar todas las decisiones en el momento en que adquieras algo. Algunas hojas de papel, en particular obras de arte e historias, así como tarjetas o cartas de seres queridos, necesitan tiempo y espacio antes de que pueda determinar lo que realmente vale la pena.
El primer paso es comenzar con una caja, un archivo o una carpeta de anillas, donde puede guardar documentos para evaluar en una fecha posterior.
Luego, una vez al año, establezca una fecha para clasificarlos todos. Proceselos con estas pautas en mente:SACUDIDA Todo lo demas. Tan nostálgicos como todos podemos estar a veces, nadie quiere entrar en la edad adulta con cajas y cajas de recuerdos. Sus gabinetes de archivo de vida te lo agradecerán.
Funcionara para ti? ¿Cómo decides qué queda y qué pasa? ¡Comparte tu experiencia a continuación!