Ganamos una comisión por los productos comprados a través de algunos enlaces en este artículo.
1. Ahogándolos
A las hierbas les encanta el agua pero no quieren nadar en ella, así que asegúrese de que sus macetas ofrezcan un drenaje suficiente. Busque ollas que tengan un orificio en la parte inferior que permita que se filtre el exceso de agua, y combínelas con un platillo para que no se ensucie.
2. Olvidando podar
Pellizque las flores y recorte su planta regularmente para evitar que se vuelva pesada. Las diferentes hierbas requieren más o menos poda (la albahaca requiere mucho; el perejil requiere muy poco), así que haz tu investigación.Jardinería Know How Ofrece instrucciones simples para cada hierba.
3. No le da al suelo un impulso de nutrientes
No confíes en la tierra para macetas en la que entra tu planta. Alimente a sus hierbas que crecen activamente con fertilizante líquido una vez por semana. Y si hace compost, asegúrese de mezclar un poco con el suelo.
4. Ser demasiado ambicioso
Cultivar hierbas a partir de semillas no es fácil si eres nuevo en la jardinería. No hay vergüenza al comenzar con una planta de inicio de la tienda de jardinería.
5. No estoy investigando tus plantas
No todas las plantas deben ser tratadas de la misma manera: el perejil requiere nebulización o alta humedad; las cebolletas no deben fertilizarse en exceso.
6. Proporciona muy poca luz
¿Dónde vive su jardín de hierbas interior? Si su ventana más cercana está orientada al norte o no recibe al menos cuatro horas de luz por día, considere moverla. Dependiendo de la cantidad de luz que reciba su hogar, las opciones de su planta serán limitadas.
7. Riego insuficiente o excesivo
Use su dedo para verificar la humedad: si está seco más allá de su segundo nudillo, es hora de regar. ¿No estás seguro de cómo saber cuándo parar? Continúe hasta que el agua pase por los orificios de drenaje.
Este artículo apareció originalmente en House Beautiful US
Desde:House Beautiful US